Jornada negra la que vivió el Athletic Club durante el día de
ayer. Desde el principio todo serían problemas, que desencadenarían en un final
extraordinariamente terrible para el equipo, con la cosecha del peor resultado
de su historia.
Todo comenzaría con la desafortunada avería del autobus del
club, que tuvo que quedarse tirado en una rotonda medianamente cercana al campo
por la rotura de un manguito que no dio más de sí. Como consecuencia la
plantilla al completo no tendría más remedio que caminar con su equipaje hasta
el campo, donde la afición la esperaba entre aplausos y otros ánimos.
Los jugadores llegarían un tanto molestos y nerviosos al campo:
Hugo con prisas, Set con un resacón del 15, Samber con los calzoncillos del
revés, Peña sin haber podido pasar por el baño desde la mañana del día
anterior, Barrena con el pelo demasido enredado, Jordi Leganés con los guantes
cambiados de mano, Nico con cinco mangas debajo de la camiseta del equipo por
congelación, Antxón con los ojos muy cargados, Jordi Gómez con el cansancio de
los cursillos pre-natal, Herny con falta de hidratos... todo esto añadido al
juego del Hosting Club al mismo tiempo en el campo colindante, que se
enfrentaba con el Cárnicas Hdez., lo que provocaría la distracción de más de
uno.
El partido
se iniciaría sin demasiadas complicaciones, pero tampoco con un espíritu
guerrero por parte de los naranjotas, que tendrían en contra la fuerza del
viento, uno de los inconvenientes a la hora de recibir balones a
puerta. Set no estaría muy acertado con las asistencias, Nico se
quejaría de la falta de pases, aunque tampoco pondría demasiado de su parte
para recibirlos, y Antxón se comería más de un balón por lo alto. El
medio del campo estaría desestructurado y en el minuto 6, llegaría el primer
gol, tras un derechazo a puerta que Jordi Leganés sería incapaz de frenar. El
Athletic intentaba reanimarse como de costumbre cuando un nuevo tanto a los dos minutos, similar
al anterior, caía como un jarro de agua fría sobre la portería naranjota. A
partir de aquí, no hay mucho más que decir, los goles fueron llegando uno a uno
hasta llegar a nueve, eso sí, con numerosos y desesperados lanzamientos a
puerta fallidos por parte de Mezclados, unos fuera, otros, como un trallazo de
Samber a a la esquina superior izquierda del larguero tras pase magistral de
Barrena con el pecho, y el resto interceptados hábilmente por el portero rival.
En general,
el Athletic Club no estuvo fino de principio a fin, ofreciendo un espectáculo
negativo de cara al campeonato, que tras la victoria del CD Bea en su encuentro, le
retrasará una vez más a la segunda posición de la tabla. Con esta tercera derrota, como dice el titular: ¡MEZLADOS LE PONE EMOCIÓN A LA LIGA!!
Ahora más
que nunca, esperamos que el varapalo sea olvidado pronto y se pueda disfrutar
del buen juego y los resultados positivos que el equipo lleva sembrando desde
que comenzó la liga.
















